Reseteo

Nuevo anfitrión, nuevo diseño de página y el mismo interés nulo del contenido.
Pensaba esmerarme en la primera entrada de la nueva singladura, quizá cambiar de estilo literario o algo. Pero para eso había que tener estilo. Lo pedí en Blogger, pero me dijeron que si quería uno tenía que quedarme sin almacenamiento de imágenes y pasé. Y es una gilipoyez. No cambia nada tener el blog hospedado en un sitio u otro. Sigues siendo un freaky por tenerlo, no hay más.
Pero a veces se buscan excusas que proporcionen un nuevo punto de partida. Borrón y cuenta nueva y donde dije Spaces, digo Blogger. "No tengamos en cuenta lo de antes. Puedo hacerlo mejor. En serio. Déjame intentarlo." Desde la mudaza al nuevo hogar al comiezo del nuevo curso, o el nuevo corte de pelo. Todo vale para sembrar proyectos que van a quedar en agua de borrajas. Como antes. La ilusión por un nuevo comienzo es ilusoria. Siempre te echarán en cara lo de ayer. No hay nuevos comienzos, sólo continuaciones. O continuos comienzos, que viene a ser lo mismo.
No puedo ofrecer un nuevo comienzo, pero sí puedo asegurar que de ahora en adelante todos mis posts tendrán un comienzo (normalmente al principio) y un fin (normalmente al principio también si tienes buen gusto). Como el de hoy. Como el de mañana. Como todos. Señoras y señores, con todos ustedes: ... Lo mismo de siempre.

(¿Hay alguien ahí?)